Volver al campo

Utilizar el campo como refugio ante la situación económica actual, se vuelve una solución para muchas personas hoy en día. Los oficios urbanos y hasta hace poco los más demandados relacionados con la construcción ,se reconvierten en rurales. El ladrillo ni se come ni ya da de comer...Y es que estar desempleado y en la ciudad te hace plantearte otras alternativas. Este año solo 15.000 españoles emigrarán temporalmente a la vendimia en Francia, y es que  la competencia cada vez es mayor , y se aumentan los requisitos(debes conocer el idioma, francés), y es que hay muchos países con nuestras mismas necesidades .Más adelante le sigue la vendimia española, recoger la aceituna, y así como temporero poder ir viviendo.

Recogiendo la hierba en el invernal de Tolibes.Foto del libro 'Los lebaniegos', de Pedro Álvarez

También volver a nuestros orígenes, a la casa en el pueblo de tu abuelo o de tu padre, donde  ibas a pasar los veranos de pequeño y seguramente pasaste buenos momentos, se presenta como opción de vida.Un lugar apartado del mundanal ruido donde poder vivir dignamente de lo que cultivas y produces, tiene esa doble satisfacción.
No hay que hacer grandes inversiones, como dicen algunos, sólo hace falta una tierra fértil ,,grandes dosis de ilusión y mucho esfuerzo, eso sí. Como Irati y Alberto,que como nos contaban este verano en Cabezón de Liébana, un pueblecito de Cantabria,  han decidido empezar de cero y apostar por sus huertos ecológicos en las tierras de su abuelo.
Prescindir del consumismo voraz al que nos tienen acostumbrados y de las engañosas comodidades que nos venden continuamente , da lugar a pensar en otros valores y prioridades. Desde aquí mucha suerte para ellos , la que acompaña a los valientes.

Una horca, horcajo, forca, tornadera o vienda restaurada.

Dependiendo del lugar donde se utilizara puede tener muchos nombres. Yo las he visto llamar así, pero seguro que  hay muchos más.Y es que ha sido antiguamente, el apero de labranza por excelencia en el campo. Utilizado para ventear la paja, sacar el grano del cereal, remover estiércol y todo tipo de trabajo de carga.
El proceso de fabricación también era laborioso. Había que "criar" la rama , y guiarla en el árbol para poder darle la forma de tridente.Ya del tamaño deseado se cortaba y se secaba colgada entre las vigas del techo para curvar los dientes.La madera debía de ser dura y flexible a la vez, la mas utilizada , el limonero, que además se da bien en cualquier terreno, y es accesible.
La he dejado en su color original ,amarillo limón, y con su pátina dejada por el uso y el tiempo.

Una horca entera ,pero mal conservada

Con grietas y signos de carcoma antigua

Primero lijado, pero en maderas tan duras es mas costoso llegar a la veta

Formaldehído (formol) para matar carcoma . Máxima  protección ya que los vapores son muy tóxicos

Inyectar uno a uno en cada agujero y grietas

Envolver con plástico y dejar en cuarentena de 2 a 3 semanas

Una vez comprobado que no hay polvillo de carcoma viva, se tapan los agujeros con cera

Aclaré la madera con agua oxígenada porque tenía mucha suciedad incrustada en la veta

Y después de encerar quedó con su pátina de uso

Y la colgué en la pared por si es de utilidad algún día

El uso puede que se lo demos ,pero a lo mejor si tenemos que comernos un calamar gigante!! Porque en el campo ya no creo que nos metamos, pero quien sabe...